La tónica dominante no es un nuevo refresco ni el apellido de una nota musical, más bien la cadencia que parecen tomar los acontecimientos económico-laborales.
Ahora es HSBC, un macro banco que ha aumentado sus beneficios un 36% y sorprerndentemente, aunque cadad día menos, despide a 30.000 trabajadores.
El capital ya sabe que puede aumentar beneficios sin necesidad de personillas, populacho o masa sucia, según les guste. Cada vez sobramos más pesonas en este mundo elitista que ha dado un giro brusco hacia la clase superior, rica, prepotente, caciquil, obtusa, mediocre, amoral, mezquina, hedonista, egotista, derrochadora, explotadora y fascistoide.
Volvemos a tiempos oscuros, a espacios de distancias, a muros del horror, a sinrazones. Que esto no desencade la solución habitual que conoce ya por desgracia la humanidad.
DG
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