martes, 8 de marzo de 2011

¡MUJER!

Admiro a la mujer.
Así de simple y claro.
Admiro su capacidad de conocimiento, su facilidad para intuir, la eficacia de sus actos, su inteligencia abierta, su practicidad, la tendencia al diálogo, su apertura al aprendizaje, a  la creación... (seguro que estoy olvidando otros muchos gestos sustanciales).
Hoy se destaca el día por llevar su nombre. Ójala no fuera necesario por que significaría que tienen respetado su lugar en la vida. Tristemente no es así y responder a la pregunta de por qué no tiene el hombre un día en el calendario, sería poner de manifiesto muchas vergüenzas consentidas por quienes hemos dominado las costumbres y los hábitos sociales a lo largo de siglos.
El mundo sometido a la globalización entre otras cosas nos posibilita la información y así saber que en casi todos los lugares del mundo en los que las condiciones de vida no alcanzan los límites tolerables por los derechos humanos, las mujeres siguen siendo lo menos valioso y a ellas se les reservan los peores trabajos, las actividades más vejatorias y la ausencia masiva de atenciones y cuidados. Son comprendidas como meros objetos.
En la otra cara del mundo, donde nos rodeamos de muchas cosas relucientes de plástico y cristal, buenos olores, asepsia y lo que damos en llamar cultura civilizada (aunque habría mucho que cribar al respecto) las mujeres han luchado por salir del penado espacio que el hombre le había conferido durante miles de generaciones. Activistas de lo femenino, gente concienciada y con arrestos, han luchado por adquirir la equiparación de derechos, por la retribución de una dignidad arrancada, por hacerse con un lugar digno en la vida. Su pelea va dando frutos aunque aun quedan cosas por cambiar.
Sin alejarme de mi perspectiva masculina, que es desde la que puedo hablar, quiero remarcar la triste deriva que lleva eso de la igualdad, convertida en tópico. ¿A qué quiere igualarse la mujer? ¿A quién quieren igualarse? El hombre ha hecho de lo masculino el coto de la brutalidad, del machismo, de todas las rudezas. El hombre ha creado las guerras y sigue en ello. El hombre mueve las corporaciones capitalistas que ahora ostensiblemente modelan injustamente el mundo. El hombre copa los agresivos puestos de administración de las empresas cuyo único fin es ganar más. El hombre no ha permitido el sitio a las mujeres científicas, artistas, filósofas, etc. ¿A ese personaje se quieren igualar?
Sería más efectivo que la revolución femenina se hiciera precisamente desde lo femenino, desde sus potencialidades, desde sus valores, es decir, hacia el territorio opuesto. Imitar el invento masculino sólo dará como consecuencia mujeres prepotentes, agresivas y de hábitos procaces. ¿Cuántas hoy días están ya sometidas a los gustos estéticos marcados por los hombres? ¿Cuántas se mortifican en el gimnasio, con las dietas o han pasado por el quirófano? Ese canon estético de los tiempos actuales ¿es gratuito o forma parte de lo que el hombre espera del sexo opuesto? ¿Dónde está el límite entre cuidarse para sí y el cambiarse el envoltorio para ser aceptada, querida, valorada, mirada? Por seguir con el examen ¿Qué tipo de mujeres trabajan delante de las pantallas? ¿Qué modelos nos embute la publicidad y la moda? ¿Hasta dónde llega el margen de nuestra tolerancia física?
Queda mucho por hacer, mucho por comprender y bastantes cosas por cambiar. Habramos la mente y busquemos lo más saludable para la vida netamente humana, para que no tenga que celebrar, por innecesario, un día de la mujer, de la infancia, del planeta, o de los derechos humanos.
David Gamella

6 comentarios:

  1. estrella martín garcía8 de marzo de 2011 a las 15:21

    Gracias David por tu sensibilidad y honestidad. Comparto lo que dices y quiero contestarte que yo no quiero ser como los hombres lo que si quiero es la igualdad de oportunidades entre las personas, y esto lo comparto con un gran número de mujeres que siguen atentas las desigualdades, expuestas al denunciarlas y entregadas al logro de este justo objetivo. Mil gracias a ellas también.

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  2. me gustó mucho tu análisis con motivo del día internacional de la mujer. Por el filo de la sierra, que se compatibiliza por el filo de la verdadera justicia que todavía hoy no ha llegado a las mujeres en general para que ocupen el lugar de igualdad que les corresponde por derecho.
    Sigue compartiendo tu acerbo cultural al servicio de causas nobles.
    Arturo

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  3. ¿Por qué será que hoy hay comentarios?. Sería bueno que siempre los hubiera y si no que hoy tampoco los hubiera habido. Señal de que todo estaría como debería estar. Hombres y mujeres juntos haciendo un mundo justo. UTOPIA ¿verda?
    Sigue escribiendo. Es uno de los placeres de encender el ordenador.

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  4. Se me pusieron los pelillos de punta con el final.
    me gusto mucho tu entrada.
    Gracias

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  5. Gracias cereza por la punta de tus pelillos y tu sensibilidad.

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